MI RINCÓN DE SOLEDAD

Desde hace tiempo ya, sentía vacío un pedazo de mi alma, siempre me había faltado algo, siempre había creído no ser feliz y había llorado hasta altas horas de la madrugada sin saber por qué.
No soy capaz de recordar cuando empezó, ni siquiera sé si tiene un principio pero el caso es que cuando me encierro en mí misma no puedo salir de allí, entro en un mundo parelelo basado en grandes sueños, en mucha tristeza y a la vez dulzura que sin quererlo me atrapa... Me cambia.
Muchas veces culpo a mis amigos de no entenderme aunque en el fondo con toda certeza estoy segura de que no podrían hacerlo, pero no me paro a comprobarlo porque realmente nunca muestro mis pensamientos, no les permito conocerme del todo. Es como un modo de protección que hace que aparentemente siempre permanezca feliz.
Tal vez vaya siendo hora de cambiar y de apoyarme en la gente, de sacar a fuera mis pensamientos y preocupaciones; sin embargo necesito ese espacio, ese rinconcito en mi, sola en mi habitación sumergida en mi pequeña aventura, donde pese a que a veces me cueste, soy FELIZ.